Aniversario de la creación del Estado
¿Cómo se gestó el Estado de Israel?
Por Matias Petasny - Vaada Jinuj Merkaz Hagshama
El 14 de mayo de 1948, 5 de Iyar de 5708, surgió el Estado Judío.
Teodoro Herzl, un visionario, fundador del Movimiento Sionista Político, fue quien dio el primer paso para la creación de nuestro Estado, con la publicación de su libro “Der Judenstaat”, (En español: “El Estado de los Judíos”). Otro momento importante para la creación fue el 29 de noviembre de 1947, cuando la ONU aprobó una resolución disponiendo la creación de un Estado Judío en la tierra de Israel.
La creación del Estado nos permitió ser dueños de nuestro destino como pueblo judío, la posibilidad de recuperar un idioma y entre muchas otras cosas, nos ayudo que “Tikvá” no sea sólo una palabra o un deseo, sino la concreción del sueño de Medinat Israel.
Desde todos los confines del mundo, se trajeron esperanzas, sentimientos y fe para la plegaria, inteligencia para el desarrollo, brazos para el trabajo y valentía para la adversidad. Desde cada lugar de la tierra, los hijos de Israel hicieron realidad la fantasía: “Lihiot am jofshi be Hartzeinu” (Lo que se podría traducir al castellano como: Ser un pueblo libre en nuestra tierra).
Una vez terminado Iom Hazikarón (día de recordación de los caídos en las guerras por Israel y del terrorismo), se escucha una estruendosa sirena, que da comienzo al festejo de Iom Haatzmaut. Es por esto que Iom Haatzmaut no es completamente alegría, ni Iom Hazikarón es completamente tristeza.
Nuevamente, como vemos en casi toda celebración judía, hay momentos de alegría, equilibrados con los de recordación y tristeza. 58 años cumple nuestro querido Estado, pero desgraciadamente no son 58 años de paz. Es posible que en algún momento se de, no pierdo mi esperanza.
Publicado en el Itón Hagshameinu, Año 2006, Nº2
La creación del Estado nos permitió ser dueños de nuestro destino como pueblo judío, la posibilidad de recuperar un idioma y entre muchas otras cosas, nos ayudo que “Tikvá” no sea sólo una palabra o un deseo, sino la concreción del sueño de Medinat Israel.
Desde todos los confines del mundo, se trajeron esperanzas, sentimientos y fe para la plegaria, inteligencia para el desarrollo, brazos para el trabajo y valentía para la adversidad. Desde cada lugar de la tierra, los hijos de Israel hicieron realidad la fantasía: “Lihiot am jofshi be Hartzeinu” (Lo que se podría traducir al castellano como: Ser un pueblo libre en nuestra tierra).
Una vez terminado Iom Hazikarón (día de recordación de los caídos en las guerras por Israel y del terrorismo), se escucha una estruendosa sirena, que da comienzo al festejo de Iom Haatzmaut. Es por esto que Iom Haatzmaut no es completamente alegría, ni Iom Hazikarón es completamente tristeza.
Nuevamente, como vemos en casi toda celebración judía, hay momentos de alegría, equilibrados con los de recordación y tristeza. 58 años cumple nuestro querido Estado, pero desgraciadamente no son 58 años de paz. Es posible que en algún momento se de, no pierdo mi esperanza.
Publicado en el Itón Hagshameinu, Año 2006, Nº2
