Me propuse hace unos
meses escribir un homenaje a una de las victimas de un atentado, como a pesar
del dolor, las familias pueden seguir adelante y tal vez logren recomponerse
parcialmente pero lamentablemente, la guerra contra el terrorismo que se vive en
estos dias me obliga a dar un giro e intentar explicar la situación de
seguridad cotidiana y la llamada de reservistas.
La primera vez duele,
es un hecho. Muchos afirman que lentamente se hace mas tolerable hasta que por
fin el dolor desaparece. No lo se, no es placentero y si bien logro olvidarme al pasar el tiempo,
es una herida que permanece abierta y en cada atentado se vuelve a abrir y producir
dolor.
Los años hacen que las
desgracias vayan quedando en el olvido para todos aquellos que no son
familiares directos, amigos cercanos o sobrevivientes, pero la vida quitada
afecta a todos.
Uno puede creerse
insensible, mostrarse duro, cuando en realidad leer, escuchar, vivir en guerra
y con el terrorismo no es tan facil de llevar.
Dias despues de
celebrar la festividad de Purim del 2007, viviendo en Jerusalem, tuve el primer
contacto con un acto de terrorismo efectuado en la misma ciudad en la que
vivia. Si bien no estaba cerca de la tragedia se convirtio en personal por ser
la primera vez que me llamaron para ver si me habia pasado algo...musica triste
en la radio marca los momentos de desgracia.
Haber servido en las
fuerzas armadas y trabajar en la capital de Israel y alrededores es parte de la
huella que dejo dentro de mi el atentado en Ieshivat Harab. Soy un educador
judio que si bien cree en la humanidad se ve obligado a mantenerse alerta,
portar un arma y pensar donde y cuando puede suceder un evento similar para
poder evitarlo.
En la operación margen
protector regrese al trabajo de seguridad despues de dos años de vacaciones en
la profesión. Con el tiempo los atentados fueron disminuyendo y si bien
continuaban, se sentian aislados y no afectaban al centro del pais.
En 17 de febrero del
2015, 29 de Shvat, despues de un largo dia laboral en seguridad, enseñando
ajedrez y disfrutando con la familia, pense en hacer horas extras. Habian
pronosticado nieve para el fin de semana y como en la zona donde vivo los dias
de nieve cierran escuelas y comercios, podia ser que varios dias no tenga trabajo.
Me ofrecieron hacer las
horas extra como supervisor de seguridad en un recital dentro del centro
comunitario de Efrat. Un trabajo sencillo, tener los ojos abiertos por si algo
llega a salir mal o si se avecina un conflicto y de ser asi, actuar como fui
entrenado. No es mi primer evento, suelen ser tranquilos, hay musica de fondo y
me pagan.
Generalmente no conozco
a los cantantes, muy a pesar de que sean con una larga trayectoria, tiendo a
googlear sus nombres o usar Wikipedia, leo sobre ellos y asi se pasa el tiempo.
Los cantantes son
Daniel Zamir e Yonatan Razel y segun el afiche del evento, el duo canta en
recuerdo de Avraham David Moses Z"L, una de las victimas de terrorismo en
Israel. Un joven estudiante de tora al que le quitaron la posibilidad de seguir
creciendo en Ieshivat Harab.
Las ultimas semanas
regresaron los atentados a lo largo del pais, si bien no habia tranquilidad
absoluta, no era el tema de conversación cual lo es ahora en los medios.
Elazar cumple su
cuadragesimo aniversario y lo celebra con un recital musical, precisa guardias
para aumentar la seguridad. Durante el trabajo, a unos cuantos kilometros de
distancia se produjeron disparos que acabaron con la vida de Eitam z"l y
Naama z"l Henkin dejando huerfanos a sus hijos que presenciaron el
horrible momento. A mi parecer, es el comienzo de la tercer intifada. Los
periodicos tienen diversas opiniones sobre si es una intifada, la continuación
del septiembre arabe, si son manifestaciones violentas, si Hamas se encuentra
detras o simplemente eventos aislados.
Lideres espirituales y
politicos llaman a seguir viviendo para evitar que los terroristas se salgan
con la suya sembrando terror e incluso hay personas que buscan justicia con sus
propias manos. Hay una gran cantidad de pistolas, y armas de defensa personal
circulando por las calles, cualquiera puede actuar sospechoso, una actividad
que suele pasar desapercibida tiende a convertirse en un objeto de revisión o
investigación, se siente la tension y la paranoia justificada. Es normal,
consecuencia de vivir como victimas en potencia de misiles, piedras, cuchillos,
cocteles molotov, disparos y el pasado domingo 11 se agrego explosivos a la
lista de atentados efectuados durante las dos primeras semanas de octubre.
Esto, no significa que este enumerando
eventos nuevos y desconocidos, lamentablemente forman parte de la vida en la
región. Hay actos de terrorismo continuamente, afortunadamente la mayoria se logran evitar antes
de llevarse a cabo y dañen a la población.
Confio en la
inteligencia de las fuerzas de seguridad y espero que pronto queden atras todos
los derramamientos de sangre.
Por la vida!