Tras haber trabajado en cementerios, rituales fúnebres, y sepultado fallecidos, entiendo a la muerte de una forma diferente, liberación física, lo que me lleva a no temerle. Pero a lo que si le tengo miedo, es a morir de una manera insignificante, sin sentido. Creo que mi objetivo en el mundo es convertirlo en un lugar mejor, a mi manera, aportar, construir, escribir, aventurarme, y aún no he podido extinguir todo lo que hay en mí.